REINA DEL CORSET? REINA DE LA OBSESION?

Por Claudia Agramonte Saba - -



Se hace llamar la ‘reina del corset’ y tiene el récord Guinness de la cintura más pequeña del mundo, con 15 pulgadas (38.1 centímetros) mismo que consiguió usando la prenda por 24 horas durante más de 22 años.

Cathie Jung nació en 1937 y vive en Connecticut. Tiene 3 hijos y está casada con un cirujano ortopédico. Lleva puesto el corset desde 1983 y sólo se lo quita para bañarse.

La mujer de 71 años dice que comenzó a usar el corset cuando estaba a mitad de sus 40’s por su afición a la ropa tipo victoriana, que se caracteriza por estilizar la cintura de las mujeres del siglo XIX.
A pesar de que su cuerpo ya no luce estético debido a lo diminuto de su cintura, Jung dice sentirse perfectamente bien y respira sin problemas aunque lleve un apretado corset prácticamente todo el día.


“Lo único que me causa molestias es sentarme en alguna silla demasiado baja, ya que mi torso se tiene que flexionar mucho”, menciona.

Sobre su dieta, asegura que tiene que comer porciones muy pequeñas y generalmente se trata de alimentos saludables, pero lo considera bueno ya que así se mantiene sana.

Por si esto fuera poco, afirma que para ella es cómodo dormir con el corset.

tightlacing

Es, hasta donde sé, la máxima exponente viva del “tightlacing” que según Wikipedia es la práctica de usar apretados corsets para conseguir modificaciones extremas de la figura y de la postura. Aquellos que practican el tightlacing son llamados tightlacers.

Sin embargo, Cathie Jung no es la cintura más breve en la historia. Se sabe que Ethel Granger tenía una cintura de 13 pulgadas de circunferencia (33 centímetros):



Pero qué sucede con los órganos internos cuando una persona usa un corset muy apretado? esta curiosa ilustración en Wikipedia, que lo ejemplifica de forma muy clara:


Como se ve, las vísceras abdominales sufren un “reacomodo” completo. Además de que las costillas se deforman para permitir una cintura tan breve, los intestinos descienden, hasta ubicarse casi de forma completa dentro de la pelvis.


No creo que sea una práctica muy saludable, aunque no he podido encontrar alguna fuente con datos científicos sobre los efectos a largo plazo del uso de corsets tan apretados, analizándolo psicológicamente, considero que es una obsesión, un bloqueo mental y el simple hecho de estar obsesionados erige una barrera psicológica que no permite modificar benéficamente la figura y mucho menos autoaceptarse.

Este tipo de problemas deben tratarse con un psicólogo, en el caso de esta mujer, a primera vista no se explica para que le servirá tener una cintura que se ve tan desagradable, pero supongo que este trastorno comenzó como una forma de mejorar su figura y luego se convirtió en una enfermedad, o en una manera de llenar algún vacío emocional.



Para terminar, una entrevista que le realizaron a esta señora que tiene la cintura del ancho de un CD



Qué dicen ustedes? ¿Les gusta como se ve? ¿Se atreven a prácticar el tightlacing?
Dejen su voz