Ese es el título de un episodio Charlie y Lola (Juan y Tolola en España), serie animada de Discovery Kids “Nunca Jamás comeré tomates” claro Lola al final termina comiendo todos los vegetales que su hermano Charlie le ofreció con otros nombres.
En días pasados asistí a una reunión de padres y maestros del colegio de mi hija de tres años Ivanna, y como de costumbre dictaron una charla sobre un tema de interés familiar; en esta ocasión se habló de “La nutrición”.
En el material de apoyo que nos facilitaron decía que los niños por naturaleza son “Neofóbicos” en realidad la palabra significa temor a lo nuevo, pero en este caso se contextualizaba en los alimentos. No hay nada más cierto, la mayoría de las veces los niños le corren a los alimentos nuevos como “el diablo a la cruz”.
A mi me pasa igual con Ivanna, es una lucha titánica ese tema. Cuando ella era bebé aceptaba gustosa todo, pero ahora es casi imposible, y en su caso es más difícil, ya que ella es alérgica a la leche de vaca, es decir que hay un sin número de alimentos que no debe comer.
Hasta hace unos meses la merienda favorita de Ivanna eran pimientos de colores, apio, zanahoria y jamón de pavo salteados, era de ensueño…de librito, pero un día sin más dejó de comerlos para siempre.
Cada día es una lucha constante para que tenga una alimentación balanceada y obtenga nutrientes de cada grupo alimenticio (carbohidratos, proteínas y grasas), pero hay que echar la pelea por el bien de su salud.
A veces los doctores piensan que uno no se esfuerza lo suficiente, o que no los presiona los suficiente...son niños, hay que sobre llevarlos, pero unos no los va a matar.
Me gustaría ver a los pediatras en sus casas lejos de las teorías, alimentando a sus niños, seguro que pasan igual o más lucha que nosotros.