ANA Y MIA (1 DE 2)

Por Claudia Agramonte Saba - -

La característica principal de la Anorexia Nerviosa es el rechazo de la persona a mantener el peso corporal normal para su edad y altura, o un gran deseo por tener y mantener un peso muy bajo, sin importarle las consecuencias fisiológicas y psicológicas que conlleve.

Generalmente, buscan la pérdida de peso reduciendo la cantidad de comida que ingieren. Además, utilizan otras "estrategias" para perder peso, como son las conductas purgativas después de las comidas (vómitos, laxantes o diuréticos) o el ejercicio físico excesivo.


Una consecuencia importante de este estado de desnutrición es la pérdida de la menstruación en las mujeres pospuberales y una gran debilidad general en los hombres. Las consecuencias fisiológicas que aparecen al principio de la pérdida de peso son: pelo lacio y débil, piel seca y deshidratada, uñas quebradizas, constante sensación de frío, hinchazón en varias zonas del cuerpo, estreñimiento, hipotensión, etc.

Es importante mencionar que cuando el inicio es anterior a la pubertad, se produce el retraso o la detención del crecimiento. Si el estado de inanición persiste puede llevar a la muerte.


Aún estando en un peso muy bajo, la persona manifiesta un miedo intenso a engordar. En un número importante de casos, este miedo está provocado por la alteración de la Imagen Corporal , es decir, estas personas suelen "verse", o en cualquier caso, se "sienten" gordas (sin estarlo objetivamente). Además, temen que si ahora no se encuentran a gusto con su cuerpo, esta insatisfacción se incrementará cuando aumenten de peso.

Al dar esta importancia exagerada al cuerpo, todas sus actividades cotidianas están en función de qué deben o no deben comer; de cuánto ejercicio tienen que hacer para compensar; de qué ropa pueden o no pueden ponerse; a qué sitios pueden o no pueden ir, etc. lo cual, les produce una gran interferencia en distintas áreas de su vida, quedando atrapadas, muchas veces sin saberlo, en su problema.

El estado de ánimo, la autoestima, su implicación en actividades como los estudios, el trabajo, las relaciones con los demás, el ocio, etc. están en función de cómo se sienten y acaban aislándose, perdiendo el interés por cosas que antes les gustaban, o realizando sus tareas de manera excesiva (p.ej., estudios, trabajo, deporte). Además, se altera su estado emocional convirtiéndose en personas deprimidas, irritables, irascibles y con un alto nivel de ansiedad.

Si además la gente que te rodea te comenta que tu carácter ha cambiado, que estás más irritada con los demás, y si piensas que puedes tener este problema, acude a un profesional que te asesorará para que puedas decidir si quieres recibir tratamiento.


Si piensas que puedes tener este problema, acude a un profesional que te asesorará para que puedas decidir si quieres recibir tratamiento.