-Fomentar la curiosidad, es decir tener interés por lo que nos rodea. Gracias a la curiosidad prestaremos más atención, preguntaremos sobre lo que nos interesa, leeremos más, etc. De esta forma estaremos activos e ilusionados y al mismo tiempo entrenamos nuestro cerebro.
- Es bueno hacer ejercicios que obliguen a fijar la atención, ya que la memoria y atención van unidas. Así por ejemplo, son muy buenos los ejercicios que consisten en buscar las diferencias, sopas de letras, crucigramas, ajedrez, memorizar números de teléfono, realizar operaciones matemáticas sencillas, etc.
- Intentar recordar y aprender letras de canciones, poesías, autores de libros que nos gustan, nombre de obras de arte que nos interesan, etc.
- Practicar la observación, por ejemplo contemplar un cuadro durante dos minutos y después intentar describirlo con todo detalle o intentar recordar detalles de la decoración de nuestra casa. Al principio es probable que te cueste recordar algunas cosas, pero con el ejercicio continuado te sorprenderás de los progresos que puedes lograr.
- Realizar ejercicios que aumenten la concentración, como contar decrecientemente desde 100 de uno en uno, después de tres en tres, de cinco en cinco, etc.
- Potenciar las relaciones sociales: de esta forma se ejercitan habilidades como la conversación, saber escuchar, la creatividad, el razonamiento, etc
- Es bueno hacer ejercicios que obliguen a fijar la atención, ya que la memoria y atención van unidas. Así por ejemplo, son muy buenos los ejercicios que consisten en buscar las diferencias, sopas de letras, crucigramas, ajedrez, memorizar números de teléfono, realizar operaciones matemáticas sencillas, etc.
- Intentar recordar y aprender letras de canciones, poesías, autores de libros que nos gustan, nombre de obras de arte que nos interesan, etc.
- Practicar la observación, por ejemplo contemplar un cuadro durante dos minutos y después intentar describirlo con todo detalle o intentar recordar detalles de la decoración de nuestra casa. Al principio es probable que te cueste recordar algunas cosas, pero con el ejercicio continuado te sorprenderás de los progresos que puedes lograr.
- Realizar ejercicios que aumenten la concentración, como contar decrecientemente desde 100 de uno en uno, después de tres en tres, de cinco en cinco, etc.
- Potenciar las relaciones sociales: de esta forma se ejercitan habilidades como la conversación, saber escuchar, la creatividad, el razonamiento, etc